Al nacer un niño un tema que muchas personas abarcan es sobre por qué la fontanela o mollera del bebé es de esa forma, si siempre va estar así o porque se da ese «hundimiento» característico en ellas que hace que no queramos tocar esa zona por miedo a que algo malo suceda.
Hay otras personas que quieren ir más allá e informarse un poco más sobre esto cómo es tu caso, por eso estás leyendo este artículo en que vas a despejar tus dudas y te indicaré los cuidados que debes tener los primeros días del recién nacido.

¿Qué es la fontanela o mollera del bebé?
La fontanela o mejor conocida como mollera es el área de la cabeza en donde los huesos del cráneo no se han unido del todo. Esta zona de la cabeza se mantiene blanda y abierta por razones que explicaremos más adelante.
Las fontanelas principales de un bebé son dos: la anterior y la posterior. Hay otros espacios blandos que también son fontanelas, pero de menor tamaño y que suelen cerrarse antes. Una vez cerradas, donde se encontraban hallaremos hueso sólido.
¿Para qué sirve la mollera?
La mollera o fontanela nos sirve para que al momento de nacer podamos pasar por el canal del parto con mayor facilidad, los huesos del cráneo no están totalmente conectados y cerrados entre sí.
Esto, justamente, permite que el niño salga por el canal del parto, disminuyendo su diámetro cefálico. Un hueso se coloca encima de otro y se afina la cabeza, cambiando su forma.
¿Cuándo cierran las fontanelas del bebé?
Las fontanelas van a ir cerrando progresivamente, esto no es de manera inmediata al nacimiento. Llevan un proceso que acompaña el crecimiento del niño y que, en base a esos tiempos, provoca la osificación.
- La fontanela anterior se cerrará completamente alrededor de los dieciocho mes de vida.
- Por otro lado, la fontanela posterior cerrará alrededor del cuarto mes de vida, siendo mucho más pequeña que la anterior.
Deformaciones de las fontanelas
La fontanela o mollera del bebé presenta ciertas deformaciones que debes prestar atención, esta anormalidad puede indicarle al médico que algo está ocurriendo con tu hijo.
En primer lugar los latidos que emana la fontanela son normales, esto se da por la dilatación de los vasos sanguíneos y la transmisión de los latidos cardíacos. No te asustes!
Sin embargo, si ves que la fontanela se hunde podría ser causa de deshidratación, esto se da en los niños que tienen gastroenteritis.
Lo contrario sucede cuando notas la mollera abultada, esto podría indicar un aumento en la presión intracraneal. En cualquiera de estos dos casos sería bueno que consultes con tu pediatra para descartar cualquier problema.